miércoles, 27 de marzo de 2013

Cesto de los tesoros y Juego Heurístico.



Es una propuesta que hacemos habitualmente en la escuela, muy a menudo, vamos, es parte del día a día. Os cuento lo oficial u oficioso, luego en casa, cada cual que se apañe como quiera o pueda. Quedaos con la idea, que es que l@s niñ@s desde muy txikis tengan la posibilidad de manipular materiales con diferente color, peso, textura, temperatura...(los juguetes, la mayoría de plástico, nos les ofrecen esta información, aunque lleven la etiqueta de “didácticos”, que yo sé de uno, que dice que son los peores, pero ese es otro tema). Bueno, explico.
  
Elinor Goldschmied es la creadora de esta actividad que a través de la exploración autónoma le ofrece al niñ@ la posibilidad de desarrollar todas sus capacidades. Con estos materiales desarrollan la sensorialidad y el conocimiento preciso de los objetos a través de la mirada, la boca, el tacto, el olfato, el oído, el movimiento.

También se muestran capaces, de establecer relaciones físicas y lógicas de medida, de dentro-fuera, de borde, de clasificación, de seriaciones matemáticas, etc. Encuentran una forma para desarrollar su extraordinaria curiosidad, investigar, concentrarse con tenacidad...

El material. Como ya he comentado los objetos del juego han de ser de fácil manejo, de materiales variados en cuanto a la forma, dimensión, textura, color, peso y, preferiblemente, de materiales naturales y no de plástico. Nosotras compramos la mayoría del material (no sólo para esta actividad) en ferreterías y Bazares, son como un saco sin fondo. Siempre descubres algo nuevo.

El cesto de los tesoros: Está dirigido a niñ@s de 6-12 meses. Se colocan los materiales en un cesto y éste en una alfombra o algo similar. El/la niñ@ muy cerca del cesto (tumbado porfa, si es capaz de sentarse ya lo hará) para que pueda acceder a él y coger lo que quiera. Yo he utilizado todo este tiempo un cesto que me regalaron cuando nació Maddi, de mimbre forrado con tela, que estaba lleno de cremas, colonias y esas cosas. Seguro que alguno tenéis.


El juego heurístico: Para niñ@s de  12-24 meses. En este caso cada niñ@ tiene su propia alfombra, con una misma propuesta. En el centro, material común en recipientes (mucha cantidad de una misma cosa en cada caja, cesto...). Es parte de la propuesta el recoger al final, agrupados los materiales en los recipientes.



En la propuesta de hoy, en los recipentes "comunes" (ja, ja, Maddi está sóla pero bueno): pedazos de cuerda, pinzas de madera, rulos de pelo, conchas de playa, arandelas de madera (de cortina).

En su alfombra: Un tubo de cartón, dos tapas de metal, dos coladores de tela, una esponja para la espalda (de esas que rascan y pican, si), dos cadenas (uy, las cadenas, lo que dan de sí), cuatro flaneras, dos bols metálicos, dos botes de madera, dos cucharones también de madera, dos cepillos, una tabla con agujeros y un montón de piedras grandes (si vivís en la ciudad, tranquilas, también las venden en los bazares, para decorar,sí, sí, venden piedras, ja.ja).

miércoles, 20 de marzo de 2013

Cose conmigo de "Mi rincón de mariposas": un desastre



Ainssss, pues lo dicho, un desastre de principio a fin. Últimamente, como ando bajika de ánimo, me apunto a todos los cose conmigo que me encuentro por el camino. Así me obligo a hacer cosas dentro de un plazo determinado, porque si me comprometo a algo me gusta cumplirlo.

Así que, y aunque mucha falta no me hacía, con ganas de aprender me apunté al “cose conmigo” organizado por mi rincón de mariposas.Es el segundo que hago con ella, el primero, fue de mis primeras costuras de fundamento, un cobertor de porteo, que hice a todo correr, y así quedó.

Pues bien, ilusionada me fui a comprar la tela. No hay mucho donde elegir por estos lares, y al final elegí esta que no me parecía que fuese un dibujo difícil de casar (ai ama! jaja). Pedí 10 cm más de lo que Dawn recomendaba, más vale. Al comenzar la labor, comenzaron los problemas, todo uno.

Pues no, no era un dibujo difícil de casar en principio, pero no me di cuenta que me haría falta mas tela para poder hacerlo. Así que, papel de manila para un lado y para el otro anduve unos días, cuando me desesperaba lo dejaba. Al final creí encontrar la solución,  como a esas alturas ya estaba más que harta y quería empezar a coser, no hice ninguna modificación del patrón, ni tomé medidas ni nada de nada de lo que había que hacer. Me dije, bueno, una M es una M ¿no? Pues no. 

Tengo unos graaandes gemelos, que en mi época de adolescente fueron motivo de complejo, más adelante de orgullo, y ahora ni una cosa ni la otra, pero ahí están y debería acordarme en estos casos por lo menos. Me acuerdo eso si, cada ve que me pongo las botas de esquiar (hasta ahora solo me valen unas, regaladas por mi ex por cierto, eskerrik asko, porque las de mujer son estrechísimas para mi). Bueno, a lo que iba. El resultado, embutida cual chorizo de Pamplona de la rodilla para abajo.

Y  ¿coser el pantalón? Ai ama, otra odisea. La tela no es que fuera elástica, es que era como bom-bom-bom bomer (os acordáis del chicle?). Compré la aguja de punta de bola, la puse, no paraban de salirme zurullos con el hilo, ajusté la tensión del hilo una y otra vez (por probar...), nada. Acabé quitando la aguja y cosiéndolo con la normal. Mi máquina no tiene puntada elástica, así que zigzag y se acabó. Que odisea. Me los pondré de pijama, porque cómodos son un rato.

Gracias Dawn por organizar una iniciativa tan chula. La próxima vez te haré caso en todo.

jueves, 14 de marzo de 2013

KORRIKA BADATOR!




Es un día importante para mi. Mi lengua materna es el euskera, el castellano lo aprendí en la Ikastola (para que luego digan algun@s). Así que no puedo dejar de emocionarme con este tipo de iniciativas. Pero diréis, ¿que es la korrika?

Es una carrera a favor del euskara. Recorrerá durante 11 días más de 2.000 kilómetros, sin detenerse en ningún momento y con la participación de cientos de miles de personas de toda edad y condición. El objetivo de dicha carrera es doble: por una parte, impulsar la concienciación a favor del euskara, y por otra, recabar fondos. 

Es algo curioso, y emocionante. Parte de un punto, este año Andoain, y termina en otro (Baiona). Hay un testigo que va pasando de mano en mano cada kilómetro. Estos kilómetros son comprados por cuadrillas, comités de empresa, familias, sociedades...y es cada cual quien decide quien lleva el testigo en su kilómetro. Dentro del testigo va un mensaje que se desvela al finalizar.

No se me hace fácil explicarlo la verdad. Ayer partió y hoy llega a nuestra zona. Así que día de emociones. Todavía no tengo claro como vamos a correr (es el primer año de Maddi, ya que se realiza cada 2). En la silleta o en la bici, pero ya estoy nerviosilla perdida y he echado alguna lagrimilla viendo videos. La primera edición fue hace 32 años, así que llevo prácticamente toda mi vida participando en ella. Recuerdo con cariño esos kilómetros que te tocaban a las 4 de la mañana en medio de la nada, lloviendo...también las juergas post-korrika de cuando era más joven...mmmm

Ah! Se me olvidaba comentar que  la comunidad euskaldun repartida por el mundo, realiza  versiones paralelas de la korrika a lo largo y ancho del planeta (si si, sin exagerar). Es bonito.

En fin, no me voy a enrollar más. Os dejo un vídeo, quizás os ayude a haceros una idea, no es de esta edición, porque con todos mis respetos a “esne Beltza” que han sido los encargados de hacer la canción de este año, me quedo con esta. Mikel Laboa y Ruper Ordoika. Dos grandes. Mikel aquí ya estaba bastante pachuchiko, pero siempre es un place oírlo. Supongo que algún día le harán un museo o algo, como  Jorge Oteiza (ainss me hierve la sangre). En fin, no me quiero enfadar que esto hoy va de buen rollo.






miércoles, 13 de marzo de 2013

Sarouel mini



Aprovechando que estoy intentando coser un sarouel para el "cose conmigo" que ha organizado mi rincón de mariposas, he hecho uno txiki para Maddi. Del mío ya os hablaré si es que consigo terminarlo. Este lo he hecho a ojo, como suelo cocinar y coser. He dibujado directamente sobre la tela. Tomarle las medidas fue misión imposible, así que, cogí unas mayas para guiarme. La tela de camiseta escasea por estos lares, así que un buen día me fui a una gran superficie (si, ya sé que dije que intentaría no hacerlo, pero...) a la sección de hombres, y compré un montón de camisetas de la talla más grande que había (2XXL) a 2 euros.

En la foto no se aprecia bien, pero es de un color mostaza muy chulo y la cinturilla morada. La foto es bastante mala pero no estamos para fiestas después de una noche soberana con picos de fiebre de 39.